IGOR DEL BUSTO
Hoy comienza en Shangai la Masters Cup, que reúne en este final de temporada a los ocho mejores jugadores del 2006. Estarán en las semis y la final aquellos que se encuentren más frescos o en mejor forma en este último torneo del año.
Davydenko está fino y con confianza ya que viene de ganar en París Bercy, donde Robredo, aunque es un jugador de tierra, alcanzó las semifinales. Nalbandian no está acabando bien el año, pero no podemos olvidar que es el actual campeón. Roddick y Ljubicic dependen en gran medida de su saque. Como estén entonados con el servicio será difícil pararles.
Rafa Nadal, aunque ha mejorado su juego en pista rápida, no ha hecho grandes resultados durante las últimas semanas. Además sale de una lesión en los abdominales que le ha impedido practicar su ‘nuevo’ saque. A pesar de todo el manacorí es una garantía de garra, intensidad y ‘killer instinct’. El que quiera ganarle tendrá que pisarle la cabeza’ y ganarle cada punto. Su grupo, con Davydenko, Robredo y Blake, es más asequible y no tendrá que enfrentarse a sacadores como Roddick, Ljubicic o Federer.
El suizo es además una persona correctísima, amable y que se relaciona sin problemas con todo el mundo. La imagen de ‘fair play’ que ofrece es buena para el tenis, aunque quizás le falte algo del carisma de McEnroe o Agassi.
A Borg le faltaron el Open USA y Australia. Cuando Rod Laver ganó sus dos Grand Slam Wimbledon, Open USA y Open de Australia se jugaban sobre hierba. A Tilden, Pancho González, McEnroe y Sampras se les atragantaba la tierra batida. Yo creo que ninguno era tan completo como Federer. Por mi edad no pude ver a Lacoste, Borotra, Tilden, Budge, Pancho González, Rosewall, Hoad, Laver o Santana pero tengo la inmensa suerte de poder disfrutar con Federer.
El suizo es el gran favorito. Viene de ganar Madrid y Basilea y es el indiscutible número uno mundial. Pero su liderazgo no es solo un aspecto coyuntural. En mi opinión Federer es el más completo y mejor jugador de tenis de la historia. Y digo ‘casi’ porque aún no ha ganado Roland Garros. En el momento que gane en París y aguante a este nivel un par de años más se habrá acabado la discusión.
Ser considerado por la ‘cátedra’ como el mejor de la historia no es solo palmarés y títulos de Grand Slam, que Federer los tiene. El suizo tiene también un estilo de juego superatractivo, natural, fluido, fácil y espectacular. Los que vivimos el tenis no dejamos de sorprendernos con su superioridad y sus exhibiciones de tenis total. El servicio es impecable; saca rápido y variado, y cuando la ocasión lo requiere conecta un ‘ace’. Su segundo saque es muy profundo y ‘botón’. Su juego de fondo es fantástico. La derecha la pega bien plana o bien liftada y casi nunca deja bolas cortas. El revés es una maravilla; puede abrir ángulos increíbles, jugar paralelos ganadores o bolas cortadas que apenas botan. Si Dios volease volearía como Federer; la pone donde quiere y a una gran velocidad. Todo esto le hace invulnerable en la red. Es rápido y aunque generalmente gana sus partidos con facilidad, es también resistente. Aún así ahí estaría su pequeña debilidad: En un quinto set su efectividad baja algo y ofrece algunas oportunidades como a Nalbandian en el Masters del año pasado o a Nadal en Roma este año.
El suizo es además una persona correctísima, amable y que se relaciona sin problemas con todo el mundo. La imagen de ‘fair play’ que ofrece es buena para el tenis, aunque quizás le falte algo del carisma de McEnroe o Agassi.
A Borg le faltaron el Open USA y Australia. Cuando Rod Laver ganó sus dos Grand Slam Wimbledon, Open USA y Open de Australia se jugaban sobre hierba. A Tilden, Pancho González, McEnroe y Sampras se les atragantaba la tierra batida. Yo creo que ninguno era tan completo como Federer. Por mi edad no pude ver a Lacoste, Borotra, Tilden, Budge, Pancho González, Rosewall, Hoad, Laver o Santana pero tengo la inmensa suerte de poder disfrutar con Federer.